Nuestro hermoso castillo de naipes
que con el más débil viento se nos cae
los cimientos que lo unen son fuertes
las torres son mas hermosas que los jardines colgantes más verdes
y la infraestructura es tan débil como el papel
se le puede llenar de amores, pero con el más mínimo impulso lo rompes
lo que nos destaca es que somos tercos constructores
porque siempre volvemos a armar nuestro castillo de naipes
enterramos en naipes los errores
por mas aún que no los arreglemos
y a la vista de todos es espléndido y hermoso
esas torres tan altas, esos balcones tan barrocos
nuestro hermoso castillo de naipes
y se van alejando y el viento lo va desmoronando
al culpable de la destrucción buscamos para ponerle corona
en nuestro castillo de naipes
somos tercos por reconstruirlo y soñar que resistirá
pero ambos sabemos lo poco que durará
dios no nos bendijo con estabilidad
pero si con perseverancia y mucho amor para dar
el amor por este castillo de naipes derrumbante
nadie sabe cual será su final
puede que nos cansemos de reconstruirlo
y hasta ayudemos a destruirlo
no lo sé,
solo soy un residente, pero sus arquitectos somos los dos
aveces llega a incomodarme la residencia
siento que no es acogedora
y me aborda la demencia
siento que soy pasajero como una moda y viene un viento débil y lo desmorona
sí, a nuestro castillo de naipes
no sé como te sentirás en su interior
pero aveces debes sentir que no hay lugar para los dos
cuando entran huéspedes
siento deseos de decirles muévanse
los considero invasores
no lo soporto y lloro para que no llores
pero su estadía trae el más frío invierno
que a la vez se vuelve el peor infierno
y de nuevo lo derrumba un leve viento
a nuestro hermoso castillo de naipes.
domingo, 31 de enero de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
me gusta mucho...!!! Es chistoso... yo también escribí uno con este título. buscalo en mi blog. El mio es un poco mas oscuro. Buen toque comparar nuestra existencia con el castillo de naipes
ResponderEliminar